Domingo pascual y el whatsapp de Stornelli

Domingo de Pascua. Domingo soleado pero de encierro y cuarentena por la maldita pandemia del coronavirus Covid-19 en medio mundo. Hasta vemos al Papa Francisco dar su misa en soledad desde El Vaticano y por la TV, uno de los pocos contactos con el mundo exterior junto con la bendita internet, que nos permite mirar otras cosas fuera de las paredes de nuestras casas, además de leer, escribir y trabajar.

Aún entre cuatro paredes, el encierro da para hacer maldades y jorobar al prójimo, por más que se encuentre a cientos de kilómetros de distancia el malvado respecto de la víctima. Este último fue el caso del fiscal Carlos Stornelli en el apacible y aburrido domingo de Pascua.

Viejo lobo acostumbrado a las peores maniobras que rodean a la política y la Justicia -recordar que una vez su custodia repelió un ataque a balazos dentro de su auto en la zona portuaria- y con el cuero curtido por mil casos sensibles que tuvo como fiscal y como secretario de Seguridad bonaerense -que también lo fue en la gobernación de Daniel Scioli- Stornelli se vio obligado este fin de semana a un recurso inhabitual en él.

El titular de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Nro. 4 de la Capital Federal, con sede en el devaluado edificio de Comodoro Py 2002, el mismo de las causas más sensibles al poder político, envió un mensaje a todos sus contactos en whatsapp para advertir de un fraude del que era víctima.

«Hola. Feliz Pascua. Si los incorporaron a un grupo llamado Apy Carlos Stornelli no soy yo ni fue creado por mí. Gracias. Carlos Stornelli», reza el mensaje enviado por el fiscal a sus contactos, según contaron fuentes judiciales.

Un rato después, Stornelli completó el envío con la revelación del número de la línea telefónica desde la cual se habría creado el grupo bajo su supuesta batuta. La línea lleva el prefijo de la ciudad de Salta. Este cronista desconoce el contenido de los intercambios de ese chat comandado por el falso Stornelli ni a cuántos de sus reales contactos logró embaucar.

«No dice el nombre pero el te es 549387…….», advirtió el fiscal. Por obvias razones, no se dará aquí el número completo de esa línea. ¿Algún aburrido por la cuarentena o algún servicio de inteligencia con ganas de provocar al veterano fiscal? Sólo el del prefijo salteño lo sabrá.

Stornelli, se sabe, aguarda la resolución de la Cámara Federal de Mar del Plata respecto de la apelación que él planteó al procesamiento que le dictó el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, por la presunta comisión de los delitos de violación de la ley de inteligencia y asociación ilícita con el detenido falso abogado Marcelo D’Alessio para supuestamente influir en causas judiciales.